La Delegación en los antiguos reinos de Valencia y Murcia de la Orden Constantiniana ha donado alimentos de primera necesidad a las Hermanitas del Cordero para atender a su labor cotidiana de cuidado y atención de los más desfavorecidos, durante una jornada que ha tenido lugar en el monasterio de la Transfiguración, situado en la localidad valenciana de Navalón.
En el transcurso de la jornada de fraternidad, que contó con la celebración de una Eucaristía en la capilla del monasterio, miembros de la Delegación encabezados por su Tesorero, el Ilmo. Sr. D. José Antonio Alarcón, entregaron los alimentos a las Hermanitas y Hermanitos del Cordero. La jornada se celebró con motivo de la Navidad.
Por su carisma, las Hermanitas del Cordero, “van como peregrinas, orantes, pobres y mendicantes, tras los pasos de santo Domingo y de san Francisco, al encuentro de los más pobres del mundo” y “comparten un mismo propósito de vida: vivir el misterio del Cordero”. Del pequeño monasterio de la Transfiguración de Navalón cabe destacar como sus casas dejan traslucir la humildad y la pobreza de nuestro Señor Jesucristo, siendo un alto en el camino y un lugar de acogida para todos los que pasan.