A lo largo de los últimos tres meses, a pesar de las restricciones de movilidad derivadas de la crisis del Covid-19, la Delegación de la Orden Constantiniana en el antiguo Reino de Valencia hace balance de una intensa actividad. Durante este período se ha puesto de manifiesto el drama social que ha aflorado con la pandemia. En aras a contribuir a mitigar esta situación la Delegación de Valencia ha logrado repartir entre las diferentes Cáritas parroquiales de su demarcación diocesana 11.000 kg de patatas, 2.000 kg de arroz y 500 docenas de huevos.
El secretario de esa delegación, D. José Antonio Alarcón, ha coordinado la recogida por parte de los operativos de Cáritas directamente en los almacenes dónde se encontraban esos alimentos.
El pasado 17 de junio y tras flexibilizarse las condiciones de confinamiento, los miembros de la Delegación pudieron por vez primera reencontrarse y lo hicieron para celebrar la Festividad del Santo Patrón de la Orden: San Jorge. Presidió la ceremonia D. José Luis Sánchez, capellán de la Delegación, con la asistencia del Delegado, D. Jose Vicente Corbí y su consejo, así como caballeros de la Orden e invitados postulantes. Tras la Santa Misa, se celebró una cena de fraternidad, informal, en el transcurso de la cual, y fieles a su cariz humanitario, los caballeros valencianos recaudaron un donativo que ha sido entregado al Real Hospital de Santiago de Cuenca, residencia de ancianos con la que la Orden ha colaborado activamente durante estos últimos tiempos.