El Archiduque Johannes prestó juramento y recibió la investidura de manos de su tío en un templo cargado de recuerdos de otros archiduques de Austria, antecesores y en algunos casos homónimos
S.A.I y R. El Archiduque Juan (Johannes) de Austria, Príncipe Real de Hungría y de Bohemia, fue creado caballero de la Orden Constantiniana por su tío el Gran Maestre durante la Ceremonia de Investidura celebrada en la Catedral de Barcelona el sábado 30 de septiembre. El Archiduque Johannes es hijo de SS.AA.II. y RR. El Archiduque Simeón de Austria, Presidente de la Real Comisión de la Orden en Austria y Liechtenstein; y de la Archiduquesa Doña María, princesa de las Dos Sicilias, Vice-Presidente de la Real Diputación de la Orden para las Casas Reales de Alemania.
El Archiduque prestó juramento como caballero sobre los Santos Evangelios ante el Vice-Gran Prior de la Orden Constantiniana, el Excmo. y Rvdmo. Monseñor D. Jaume Traserra y Cunillera. Tras ser revestido con el manto coral de la Orden por su padrino, el Excmo. Sr. Duque de Hornachuelos (G. de E.), Presidente de la Real Comisión para España, S.A.I. y R. recibió de manos de su tío, S.A.R. El Duque de Calabria, Gran Maestre, el diploma y las insignias de Caballero Gran Cruz de Justicia.
A continuación, el Archiduque Johannes fue instalado en el coro de la Catedral, junto a sus nuevos Hermanos de Hábito, ocupando el sitial que usó su antepasado el Archiduque Fernando de Austria, Infante de España y más tarde Emperador de Romanos, durante el XIX Capítulo de la Orden del Toisón de Oro, celebrado en este templo en 1519.
El Duque de Hornachuelos, Presidente de la Real Comisión para España, actuando como padrino, envuelve con el manto al Archiduque.
Los Archiduques de Austria en la Catedral de Barcelona
La Santa Iglesia Catedral Basílica Metropolitana de Barcelona, bajo la advocación de Santa Eulalia y de la Santa Cruz, es depositaria de numerosos recuerdos que la vinculan a la Casa de Austria. En ella se celebró el XIX Capítulo de la Ínclita Orden del Toisón de Oro, en 1519, presidido por el entonces Archiduque Carlos de Austria, Rey de las Españas, quién poco después se convertiría en Emperador de Romanos, conociendo el advenimiento a esta dignidad suprema electiva precisamente en Barcelona (siendo conocido a partir de entonces como Carlos V). Durante el Capítulo el Archiduque Fernando, Infante de Castilla y de Aragón (luego rey de Romanos y Emperador del Sacro Imperio «Fernando I», y fundador de la Rama Alemana de la Casa de Austria) fue nombrado caballero del Toisón. No obstante, D. Fernando había tomado previamente el collar y no estuvo presente físicamente en el Capítulo barcelonés, dado que su hermano el rey Carlos dispuso su marcha a los Países Bajos tras las cortes de Valladolid en 1518. Con todo el sitial con sus armas en la Catedral quedó como testimonio de su nombramiento como miembro de la Orden.
La presencia de Archiduques de Austria en la Catedral fue continua durante los casi dos siglos en los que la Augustísima Casa reinó sobre Barcelona, el Principado de Cataluña, la Corona de Aragón y la Monarquía de España.
Además del mencionado Archiduque Fernando, luego Emperador; otro archiduque del mismo nombre dejó una honda huella en la Historia de Cataluña: Don Fernando de Austria, Infante de España y Cardenal, quién fue nombrado en 1632 virrey y capitán general de Cataluña por su hermano Felipe IV, jurando ese eminente cargo en la Catedral Barcelonesa.
Destacan sin embargo los dos Juanes de Austria, miembros de la dinastía (que no fueron Archiduques ni Infantes, al no ser hijos de matrimonio), que dejaron mayor rastro en la ciudad y particularmente en la Seo.
El primero (1545-1577) fue el hijo natural de Carlos V y hermano de Felipe II, el gran vencedor de la batalla de Lepanto contra los Turcos y héroe de la dinastía, quién visitó la ciudad hasta en 4 ocasiones. Don Juan fue virrey de Nápoles y Gobernador General de los Países Bajos, dónde falleció en 1578. Según la tradición, ofreció a la Catedral la talla del Cristo de Lepanto, que se custodia en la Capilla del Santísimo de la Catedral.
El segundo Juan de Austria (1629-1677), hijo bastardo del rey Felipe IV, ocupó el cargo de Virrey y Capitán General de Cataluña entre 1653 y 1656, tras haber tomado la ciudad a las tropas francesas en 1652. Recuerdo de la recuperación de la ciudad son las llaves de plata que, aún hoy, sostiene en sus manos la imagen de Nuestra Señora de la Concepción, y que fueron rendidas a Don Juan (José) de Austria tras la capitulación de Barcelona a las armas de su padre.
Con el ingreso del Archiduque Johannes como caballero de la Orden Constantiniana en la Catedral de Barcelona, se perpetua una larga tradición de presencia de Archiduques en Barcelona y son 3 los Juanes de Austria cuya memoria quedará ligada por siempre jamás al primer templo de la Ciudad Condal.