Dos containers de pienso ganadero, un millar de pares de zapatos, material agrícola, material sanitario y de primera cura. Merecía la pena ir a comprobar cómo se hacía efectiva la entrega de la aportación constantiniana para el pueblo libanés. El Líbano se encuentra ante una situación dramática, con constantes tensiones fronterizas, grupos armados, inflación galopante, fuerzas armadas que no pueden pagar a sus soldados y un sinfín de calamidades con un vacío de poder cronificado y la imposibilidad de realizar reformas que garanticen el cumplimiento de los requerimientos internacionales.
Si en el año 2022, la Orden Constantiniana, llevó una ambulancia hasta el corazón de la región transcarpatiana en plena guerra ruso-ucraniana, conducida por nuestro Gran Maestre con dos Caballeros (el Duque de Linares y Alejandro Ferrer Dalmau), este año también se ha trasladado al Sector Sur del río Litani, en el Líbano, una comitiva Constantiniana con Don Pedro a la cabeza, para comprobar la entrega de la ayuda Constantiniana sobre el terreno.
Poca o mucha, la ayuda tiene que llegar al beneficiario final. Esta es la premisa de la Orden Constantiniana y nuestro Gran Maestre se afana por que se cumpla. Es decir, o la ayuda se lleva en mano, o se delega la entrega en alguien con garantías y con la supervisión de la Orden. Es por esta razón que los Caballeros de nuestra Orden se desplazaron a Tierra Santa para supervisar la llegada y entrega del material enviado para intentar paliar algo la gran necesidad que hay en esa zona ¿Y qué mejor aliado para ello que el contingente español desplegado en la misión de Naciones Unidas Libre Hidalgo XXXIX?
A su llegada a Beirut, Don Pedro fue recibido por el Embajador del Reino de España en Beirut, Excmo. Sr. D. Jesús Ignacio Santos Aguado y el General Jefe de BRILIB XXXIX, Excmo. Sr. D. Luis Jesús Fernández Herrero. Términos como CIMIC, G-9, posición UNP 7-2, Sector East, posición india UNP 4-7, tumba del Sheik Abbad, NEPBATT y otros muchos, perdurarán en la memoria de D. Pedro por unos cuantos años. Fueron cuatro días con dos grandes jornadas de trabajo.
Nuestro Gran Maestre empezó visitando el monumento de Nuestra Señora de Haramoun para posteriormente participar en la entrega de calzado donado por TEMPE Grupo Inditex en Cáritas de Kleyaa. Los beneficiarios se sorprendieron de la calidad y comodidad del calzado y lo agradecieron enormemente. A continuación, tuvo la oportunidad de conocer la Iglesia de San Jorge y comprobar la devoción a este Santo en todo el llamado “Corredor Cristiano”, una pequeña alineación de poblaciones cristianas en un entorno chiíta. Hicieron un alto en la carretera de El Khiam, donde tuvo lugar en 2007 el atentado donde fallecieron seis paracaidistas españoles; y allí fue donde los recordaron con una bonita oración.
Posteriormente D. Pedro tuvo la suerte de estar presente en el brindis de celebración por el 9º Aniversario de la Proclamación de D. Felipe VI, celebrado en la Base Militar Miguel de Cervantes. Tras comer con nuestros soldados, compartiendo rancho, partió para participar en la donación de pienso que la Orden Constantiniana, gracias a la generosidad de Piensos Thurma, había llevado a tierras libanesas. D. Pedro compartió conversación con las autoridades y con la población local, interesándose por las necesidades del campo y sus gentes.
En la Base Miguel de Cervantes pudo asistir a la Santa Misa oficiada por el Capitán Capellán Castrense. Al día siguiente tras un breve “briefing” con el General Herrero y su Jefe de Estado Mayor, la comitiva Constantiniana volvió a subirse en los vehículos para conocer sobre el terreno la célebre “Blue Line”. Primero visitaron las distintas posiciones del batallón indio y posteriormente la posición española donde también recordaron al cabo Francisco Javier Soria que falleció en 2015 en acto de servicio.
Compartieron comida con los soldados españoles de la posición y posteriormente visitaron las otras posiciones de vigilancia del contingente español en la “Blue Line”. La siguiente etapa fue la del contingente nepalí donde también conocieron la tumba del Sheik Abad antes de llevar a cabo la donación de material agrícola en Markaba, donde pudieron compartir experiencias con los cooperativistas agrarios locales.
No había tiempo para más. La Orden Constantiniana comprobó que el resto material sanitario, pienso y calzado había llegado en perfecto estado. Los próximos días los Cascos Azules de BRILIB XXXIX, entre los que también hay un Caballero Constantiniano se encargarán de hacer el reparto entre los más necesitados.
S, A. R. se despidió del contingente impresionado por el gran trabajo que realiza el equipo CIMIC y G-9 del contingente español en el Líbano. Sus palabras dirigidas a todos los allí presentes fueron de agradecimiento, admiración y satisfacción por la profesionalidad y buen hacer con la que los Cascos Azules de BRILIB XXXIX, cumplen con la premisa de garantizar que la ayuda llega “donde tiene que llegar”. Agradeció a todos su generosidad y dedicación.
Enlace de la Noticia: